Los instrumentos cartográficos

La cartografía se va a convertir en un argumento fundamental a la hora de encontrar un portillo de claridad que arroje a la luz a la cuestión. No en vano es el conjunto de estudios y operaciones científicas, artísticas , y técnicas que intervienen , a partir de los resultados de observaciones directas o de la explotación de una documentación, con vistas al establecimiento de mapas y otros modo de expresión .(C.F.C).

Hay que admitir por tanto, que incluye operaciones como, el levantamiento sobre el terreno, la recogida de informes escritos y los conocimientos que le transmiten las gentes de los lugares que se cartografían. Se torna por tanto insoslayable acudir a esta fuente, debido al carácter de este trabajo que ahonda en las raíces históricas de las denominaciones que se le han dado a las Sierras

Otra de las características de la disciplina es que le exige al cartógrafo un conocimiento profundo tanto de los métodos de estudio del objeto a cartografíar como aptitud para concebir una expresión gráfica precisa.

Vamos a proceder al análisis y comentario de una serie de planos y mapas que r4epresentanla zona serrana desde el siglo XVI. No hemos encontrado nada anterior que fuera de importancia. Los dividiremos en dos partes, situando el punto de inflexión en el siglo XIX que será cuando se desarrollan las primeras innovaciones de la cartografía científica contemporánea.

Debemos también advertir que dentro de los instrumentos se ha seleccionado tanto cartografía topográfica como temática, si bien se incide mas en la primera, identificando los accidentes del terreno y los objetos concretos que se encuentran permanentemente sobre él.

Primera etapa (siglos XVI-XVIII)

Debido al descubrimiento de América que concentra todas las energías de los cartógrafos, no vamos un mapa de Andalucía hasta el 1579, el “Hispalense Conventus Delineatio” realizado por el andaluz Jerónimo de Chaves, cartógrafo de la escuela sevillana. El mapa formó parte del Atlas de Abraham Ortelius.En el se representan algunos de las poblaciones serrana Los Montes de Sierra Morena se extienden por el territorio objeto de nuestro estudio, sin, aparecer aun Sierra de Aroche.

En el siglo XVII contamos con dos mapas, el “Andaluzia Continens Sevillam y Cordubam” (1666) edita por Guillermo Jansonius, donde nuestra zona comprende las estribaciones más occidentales de los Montes de Sierra Morena, sin aparecer divisiones. Es un mapa de Arzobispado de Sevilla. Hacer notar que el lugar, de Hinojales, que posteriormente le dará nombre a su sierra, no aparece.

El mapa del Reino de Granada y Andalucía de Rossi (1696). Va a ser el plano más clásico y fundamental debido a los niveles de detalle que presenta. Por primera vez aparecen representadas las Sierras de Aroche y de Constantina dentro de la cadena montañosa de Sierra Morena. La primera se extendería aproximadamente por lo que hoy es la comarca de la Sierra de la provincia de Huelva, parte del oeste de Sevilla y comarca del Andévalo; la segunda ocuparía la actual Sierra Norte de Sevilla. La localidad de Aroche aparece resaltada por consecuencia del importante papel militar que le toca jugar en esa época.
Tenemos que avanzar algunos años para que se confeccione un mapa que ha sido tomado como referente en muchos estudios históricos. Se trata del mapa del Reino de Sevilla de D,Tomás López. (1767), el cual es parte del Atlas de España. Fue un gran esfuerzo, teniendo en cuenta el método tan particular que utilizó (envío de cuestionarios), pues hizo el mapa desde su despacho de Madrid, sin la comprobación in situ de los datos. Esto le llevó a cometer graves errores en casi todas las hojas.

La hoja del Reino de Sevilla nos es de poca ayuda, pues, aunque se representa el Arzobispado, Obispado y Tesorerías, se silencia cualquier referencia a las distintas Sierras.
El mapa de la Bética Antigua por D. Juan López de 1788 tampoco nos aporta nada, apareciendo una referencia territorial cual es los Montes Marianos.

Casi en los finales de (1765) un mapa alemán de Konigreichs Sevilla de Franz Johann Joseph Von Reilly, basado en el Tomás López nos menciona a la Sierra de Constantina, pero no aparecen su homónima para la parte más occidental.

Segunda etapa: modernidad y contemporaneidad (siglos XIX y XX)

Si los siglos anteriores han sido parcos en referencias a nuestras Sierras, los siglos XIX y XX invierten la tendencia, consecuencia de un mayor desarrollo en las fuentes cartográficas.
En el año 1850 el mapa de la provincia de Huelva del Atlas de Bachiller nos sitúa la Sierra de Aroche a la altura de Almonaster-Cortegana-Alájar, y la de Constantina al norte de Hinojales-Arroyomolinos de León. La primera coincide con toda la actual comarca serrana y gran parte del Andévalo. Evidentemente contiene errores de bulto, pero lo importante para nosotros es que la Sierra de Aroche continúa extendiéndose por una gran porción de territorio en esta fecha tan avanzada. Aunque nos aparece la Sierra de Aracena, se resalta este municipio, por la pujanza económica y política de Aracena como cabeza del partido judicial.

El mapa de la provincia de Sevilla Huelva según grabado de R. Mabern y E. Mabon (1853) representa a los partidos judiciales, siguiendo con la división de Sierras de Aroche y de Constantina, la una para la «serranía de Huelva » y la otra para la de Sevilla. Nada en el tema nos va a aportar una de las obras cumbre de la cartografía española, cómo fue el gran Atlas de España y Posesiones de Ultramar, realizado científica mente por Francisco Coello de Portugal y Quesada en 1869; evitado privadamente junto al Diccionario Geográfico -Estadístico de Pascual Madoz. Solo aparece una referencia general a Sierra Morena.

En el cromo-litografía de la provincia de Huelva de Francisco Boronat y Satorre (en torno a 1880), dedicado a Luis Fernández pinzón va a aparecer por primera vez en un documento que cartográfico de la Sierra de Aracena y la subdivisión de la Sierra en Picos de Aroche.

En la reseña geográfica y dentro de las montañas se va a decir:” pertenecen a las estribaciones occidentales y meridionales de la cordillera Mariánica, con las denominaciones de Sierras de Aroche, Aracena y Andébalo. Las eminencias más notables son los Picos de Almonaster, San Cristóbal, Sierra del Castaño y los Montes de S. Ginés y Santa Barbara. En la Sierra de Aroche descuellan los Picos de Aroche, castillo del Cuerno y del Viso y en la de Andébalo Sam Cristóbal y Cabezas del Cejo”.

Nuestro siglo va a ser prolijo en la cantidad y calidad de mapas que los diversos servicios ponen a nuestra disposición. A pesar de ello el problema se va a ir enmarañando como consecuencia de la pérdida de topónimos en aras a una mayor funcionalidad, acompañándole un desconocimiento de la geohistoria de la zona.

Se va a representar las diversas sierras, pero por siempre atendiendo a un caprichoso resalte o supresión de unas en beneficio de otras; esto crea una confusión manifiesta, sin llegar a comprender los motivos de la importancia de determinadas serranías.

Una exposición celebrada en Huelva en 1994 “Huelva la representación del territorio” organizada por la Sección de Archivos de la Diputación Provincial puso al descubierto una carta geográficominera de la provincia de Huelva de 1916 propiedad de la Fundación Riotinto.

A finales de los años 60 Bosque Maurel, desde el punto de vista geográfico-regional, hace una comarcalización de Andalucía, introduciéndonos, de forma peculiar, dentro de la Tierra Atla que comprende la Sierra tradicional y la cuenca minera de Riotinto

Siguiendo criterios demográficos el Ministerio de Educación y Ciencia realizó otra clasificación (1974). Se dividió la provincia en 9 comarcas encabezas por diez centros. La Sierra más occidental tenía centro en Cortegana y la más oriental en Aracena.

En 1978 en Ministerio de Agricultura publica un mapa comarcal español por provincias. Huelva se organiza en seis comarcas agrarias, perdiendo la Sierra los municipios de la Granada y Campofrío.
El sistema de Comercialización (1983) y el Sistema de Ciudades (1986) que ha levantado la Junta de Andalucía potencia la capitalidad de Aracena, que reúne variables como índice importante de comercios, transportes comunicaciones y servicios.

En 1985 en el Plan especial de protección del medio físico y catálogo de espacios y bienes protegidos de la provincia de Huelva se atiende al medio físico, con lo que se nos denomina Sierra.
A finales del Siglo XX la Diputación Provincial de Huelva tiene estructurado el territorio serrano en dos partes la Sierra Oeste y la Sierra. Este con sedes en Cortegana y Aracena respectivamente. Sin embargo, se observa una tendencia a dividir la comarca en cuatro espacios en aras de una mayor funcionalidad político-administrativa, con centros en Cortegana, Cumbres Mayores, Santa Olalla del Cala y Aracena.

Está misma institución para prestar y garantizar ciertos servicios ha establecido mancomunidades. Los municipios de nuestra comarca se incluyen en 4: Sierra occidental con sede en Cortegana; Rivera de Huelva con sede en Aracena; Sierra minera con centro en Santa Olalla del Cala; y mancomunidad Cuenca Minera, dónde se incluyen los municipios serranos de la Granada de Riotinto y Campofrío.

Recapitulando podemos decir, sin temor a equivocarnos, que lo que hoy se conoce como la Sierra de la provincia de Huelva es una COMARCA HISTÓRICA. Las diversas comarcalizaciones la individualizan perfectamente de los demás territorios provinciales.