El periodo Andalusí

En Aroche contamos con un estudio de Susana Fernández Gabaldón de cerámicas recogidas en superficie en la zona del Llano de la Torre o “Ladrillero” (1992) fundamental para entender el poblamiento en ésta época. A ello hay que sumar los artículos de Juan Aurelio Pérez Macías, el cual llevó a cabo una excavación de urgencia o cata de comprobación próxima a donde se han construido algunas naves industriales, constatándose el hallazgo de cerámicas de formas altomedievales islámicas, la escasa presencia de vidriado y la producción metalúrgica de hierro, documentándose también una estructura doméstica con muros de mampostería y pavimentos de ladrillos y dos hornos para fundir el mineral.

La Sierra se la repartirían la Kûra de Beja y Sevilla, perteneciendo a la primera el iqlim de Arun/Aarhus (Aroche)

De todos los lugares fortificados de la Sierra, era Aroche el que jugaba el papel principal y al que los estudios históricos poco a poco están haciendo justicia. Además era la única localidad que desarrolló un protagonismo político individual, lo que nos hace concluir que fue la cabeza de todo el territorio serrano, atestiguada desde el siglo IX, y con un elemento fundamental defensivo como fue su castillo. Aroche al ser una parte integrante de la Kura de Beja, fue cabeza fronteriza por un lado con la Kura de Sevilla y por otro con la de Mérida, teniendo a Niebla al Sur, convirtiéndose en un punto estratégico de primera magnitud.
También refuerza esta hipótesis su superior presencia en las fuentes árabes y su destacado papel en los sucesos de la fitna, siendo Aroche una fortaleza gobernada por un señor, relacionado todo ello con el proceso de rebeldía de los señores muladíes contra el Estado Omeya Cordobés.

La principal fuente de información respecto a Aroche es la crónica de Ibn Hayyân (1076) quien alude en varias ocasiones a esta localidad para contar sucesos de la fitna dentro del período conocido como Emirato de Córdoba. Durante esta etapa Aroche fue el núcleo de resistencia de uno de los señores muladíes enfrentados al poder de la dinastía Omeya llamado Bakú b. Maslama.

La siguiente referencia a Aroche en las fuentes escritas está relacionada precisamente con este Bakr b. Maslama y sus contactos con los otros rebeldes de la zona del Occidente andalusí.

El asentamiento primitivo árabe puede reducirse al Llano de La Torre o Ladrillera, que una vez prospectado y estudiado ha demostrado que se abandonó en el siglo X, probablemente en el momento de las continuas revueltas muladíes. Para Pérez Macías fue un asentamiento muladí que se formó por la concentración de población rural de la vega del Chanza y de poblados en alturas como las Peñas de Aroche. Lo que desconocemos es cuándo se trasladó esta población hacia el Llano de La Torre, convirtiéndose a lo largo de los siglos IX y X en el lugar central de la comarca.

A partir de la segunda mitad del siglo XI algunos arqueólogos piensan que se habría desarrollado en el actual emplazamiento de Aroche una ciudad de tamaño medio que se extendería por parte del caserío actual, teniendo el castillo y una cerca de tapial como guardianes. Se apoyan en fuentes bajomedievales como el sello del concejo de Aroche que conserva el alminar de una mezquita y que con la entrada de los cristianos debió de ser suplantada por la actual Iglesia de Nuestra Sra. De la Asunción.

Yâqût al –Hamawî (1226) en su diccionario de lugares menciona el topónimo Arûn como uno de los distritos de la cora de Beja, contando con unos paños de lino que son los mejores de Al-Andalus y que debieron de proceder de la siembra en las vegas de las riveras de Chanza y Alcalaboza.

Otras fuentes donde se menciona Aroche son las de tres sabios o ulemas andalusíes, dos de los cuales son arochenos, mientras el tercero va implícito en la nisba al-Arawchî

En resumen, podemos decir que Aroche fue el asentamiento más importante de toda la comarca serrana durante todo el período islámico, existiendo testimonios al respecto desde el siglo IX, como lo atestiguan las nueve fuentes árabes donde se cita. Su entidad poblacional es mencionada a través de cuatro topónimos: Arûch o Arawch, Arûcha, Awruch y Arûn.

La época del Calificato de Córdoba (929-1032), se menciona Aroche como fortaleza o castillo y su dependencia de la ciudad de Beja, en concreto el famoso cronista y geógrafo cordobés Ahmad b. Muhammad b. Mûsa al-Râzî (m.post.961)